Una avalancha repentina desbordó la tranquila ciudad de Dharali, en el estado de Uttarakhand, en el norte de la India, dejando al menos 100 personas desaparecidas y causando la muerte de cuatro. Imágenes impactantes captadas por cámaras locales muestran cómo un torrente de agua fangosa arrasó edificios de varios pisos, sumiendo a los habitantes en una pesadilla natural.
Los primeros informes indican que las lluvias torrenciales, provocadas por un aguacero inesperado, generaron un deslizamiento de tierra masivo que arrasó todo a su paso. Decenas de personas fueron vistas corriendo por las calles, pero el avance imparable del alud las absorbió en cuestión de minutos. El ministro de Defensa, Sanjay Seth, confirmó que las autoridades están haciendo todo lo posible por rescatar a los sobrevivientes y localizar a los atrapados entre los escombros.
Con 150 soldados desplegados en la zona, ya han sido rescatadas unas 20 personas, aunque el balance de daños sigue aumentando. En las imágenes compartidas por el ejército, se observa cómo el río de lodo cubría casi todo el pueblo, con barro llegando hasta los techos de las viviendas.
El primer ministro Narendra Modi expresó sus condolencias y garantizó que los esfuerzos de rescate no cesarán. A su vez, Pushkar Singh Dhami, ministro principal de Uttarakhand, calificó el suceso como “extremadamente triste y angustioso”, subrayando que la intensidad de las lluvias fue un factor clave en la devastación.
El cambio climático, que aumenta la frecuencia e intensidad de las lluvias, es señalado como un factor que contribuye al crecimiento de estos desastres naturales. De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial, fenómenos como las inundaciones y sequías se volverán más frecuentes debido a los ciclos de agua impredecibles que el cambio climático está acentuando.
Mientras tanto, las labores de rescate continúan y se espera que la cifra de víctimas y desaparecidos siga aumentando.

